Los alquileres en Madrid, Barcelona, Valencia y Málaga se disparan en su mayoría por latinoamericanos que pasan una temporada en ese país y tienen alto poder adquisitivo. ¿Quiénes son?

Los precios del alquiler en España no paran de subir y la razón es sorprendente: sube la demanda de arriendos temporarios y la mayoría de los clientes son de Latinoamérica. Se trata en su mayoría de nómadas digitales, estudiantes de maestrías o ejecutivos de empresas. Un informe elaborado por Homeclub afirma que en su mayoría son de LatAm.
Quienes alquilan de forma temporaria tienen entre 35 y 45 años, con educación superior y un nivel de ingresos alto. Respecto a su estado civil, el 80% son solteros.
El informe asegura que de los alquileres demandados, el 47%, provienen de América Latina, mientras que un 21% de españoles que cambian temporalmente de ciudad o que necesitan una vivienda de manera temporal. Les siguen los inquilinos llegados de otros países de Europa, con el 14% del total; mientras que un 11% proceden de Estados Unidos y Canadá y el 7% los constituyen ciudadanos de otras nacionalidades.
“El perfil del inquilino del alquiler flexible ha evolucionado enormemente a lo largo de los últimos 20 años en España. En su origen, el perfil predominante era el cliente corporativo, mientras que en los últimos años el nómada digital se ha hecho un hueco importante en este segmento”, afirma Daniel Hermoso, cofundador y presidente de Homeclub.

Una vez que llegan a Madrid, Barcelona, Valencia o Málaga eligen zonas ‘prime’ de las principales capitales como el Barrio de Salamanca o Chamberí, de Madrid. En cuanto al tipo de inmueble, buscan estudios y apartamentos de una o dos habitaciones, que constituyen el 80% de la demanda. Además, buscan propiedades con servicios incluidos, flexibilidad y espacios comunitarios como co-working y gimnasios. El diseño interior también es importante para estos inquilinos.

En el primer trimestre de este año los alquileres de temporadas han aumentado un 56% respecto al mismo periodo del año anterior, mientras que se desploma la oferta de alquileres permanentes.
El Ministerio de Vivienda quiere frenar esto y exige a quienes pongan su piso en alquiler acreditar y justificar la causa que les lleva a realizar esta modalidad de renta al formalizar el contrato. Esta es una de las medidas que el Ministerio de Vivienda y Agenda Urbana ha decidido incluir en el desarrollo del artículo 3 de la Ley de Arrendamientos Urbanos (LAU).
Estos contratos, junto a los turísticos y a los de habitaciones, tendrán que registrarse en la plataforma única estatal con la que el Gobierno pretende perseguir posibles fraudes. Sin embargo, poco se ha logrado con esto, ya que cada propietario hace su contrato como desea, como puede, como quiere y cada vez hay menos viviendas disponibles en España.