Deloitte lanzó el informe “Mujeres en el trabajo 2024: Una perspectiva global”, y las encuestadas aseguran sentirse más estresadas que antes por la combinación de carrera-familia. La salud mental es la principal preocupación.

La mitad de las mujeres que trabajan aseguran que sus niveles de estrés son más altos que hace un año y que están preocupadas por su salud mental. Así se desprende del informe “Mujeres en el trabajo 2024: Una perspectiva global”, de la consultora Deloitte , que encuestó a más de 5,000 mujeres en distintos lugares de trabajo de 10 países.
En el informe destaca que se mantienen altos los niveles de estrés, sobre todo por la gran cantidad de compromisos y responsabilidades que siguen teniendo afuera del trabajo. “Las mujeres cargan con mayores responsabilidades en las tareas del hogar y esta carga está afectando sus carreras”, afirma el informe.
La salud mental es una de las tres principales preocupaciones de las mujeres a nivel mundial en los lugares de trabajo (48%), quedando sólo por detrás de su seguridad financiera (51%) y sus derechos (50%).
Es que el problema del equilibrio entre la carrera y las responsabilidades domésticas se agudiza. La mitad de las que viven con su pareja y tienen hijos asumen la responsabilidad del cuidado de del hogar, frente al 46 % en 2023.

“Mientras las empresas examinan las políticas híbridas y de regreso a la oficina, la flexibilidad y el equilibrio entre vida personal y laboral son claves para retener a las mujeres en su vida laboral”, asegura el informe
Este año se ha visto una mejora notable en las experiencias de las mujeres con el trabajo híbrido, incluso en lo que respecta a la exclusión, la previsibilidad y la flexibilidad.
Sin embargo, aproximadamente tres de cada 10 mujeres todavía sufren exclusión de reuniones, por falta de previsibilidad en su patrón de trabajo y falta de flexibilidad: si tienen obligaciones e hijos no pueden asistir a reuniones no pautadas con planificación, y si necesitan un día para cuidar enfermos pierden competitividad con sus compañeros.
La encuesta además muestra que una cuarta parte de las mujeres encuestadas comentaron no querer ascender a un puesto de liderazgo senior en su organización, y la principal razón es que están desanimadas por la cultura de la empresa. Sin embargo, en las organizaciones conocidas como “Líderes de Igualdad de Género”, el 92% de las mujeres sí quieren avanzar a un puesto de liderazgo superior.